Los fantasmas tristes de Mariana Enriquez se pasean por una Argentina violenta y polarizada : Entretenimiento de España
Mariana Enriquez
Editorial: Anagrama
Fecha de publicacion: 2024
En agosto de 2023, dos hombres mataron a Morena Dominguez, una niña de 11 años, que se dirigia al colegio. Los ladrones la arrollaron con el fin de robarla. Su muerte no solo provoco una gran conmocion en el pais, tambien sirvio para generar un cambio drastico del voto hacia la derecha en Argentina meses antes de los comicios. En un pais que ha reducido su tasa de muertes violentas casi un 10% segun los datos oficiales, los expertos siguen señalando la importancia que estas noticias tienen en la percepcion de la violencia en el pais.
Por decirlo de alguna forma, los muertos en Argentina hablan, sostienen un relato que tiene que ver con la vida de los vivos, que les incomoda y recuerda que siguen muy cerca. En Un lugar soleado para gente sombria, Mariana Enriquez hace un ejercicio de nigromancia literaria en el que el terror y lo cotidiano se encuentran en la crudeza de sus doce nuevos relatos editados por Anagrama en nuestro pais.
Impunes e incomodos
El 40% de los homicidios en el pais sudamericano quedan impunes. Son historias incompletas que los familiares de las victimas deben cargar a sus espaldas, intentando recomponer el dolor de quienes se fueron. En Mis muertos tristes, el primer cuento, la protagonista puede apaciguar a los espectros que se pasean por su barrio. Es capaz de escucharles y redirigirles en su camino. Ellos se asustan al ver sus heridas, algunas, muy jovenes, sacan fotos con la misma inercia de la edad que abandonaron al morir. Los espectros de Enriquez conservan el impulso de vida que se quedo en su cuerpo antes de ser asesinados.
Los fantasmas se convierten en vestigios reconocibles de la violencia con la que conviven sus vecinos
Un grupo de adolescentes, brutalmente ejecutadas unos dias antes, reaparecen en el lugar donde se las vio por ultima vez. Cuando observan el altar con flores y fotos dedicadas a cada una de ellas, se asustan, gritan. La mujer trata de dirigirlas hacia un lugar distinto, aunque no sepamos cual, sabemos que esta lejos del dolor que ahora las oprime. Los fantasmas se convierten en vestigios reconocibles de la violencia con la que conviven sus vecinos.
Espectros molestos que ululan por las noches y no dejan descansar. Un hombre escucha cada noche los pasos del ladron que se precipito desde su tejado unas semanas antes, repitiendo el mismo gesto suicida y cayendo al patio una y otra vez. Le recuerda que cuando ocurrio por primera vez, el no le brindo ninguna ayuda, dejandole morir en su patio. La protagonista se enfrenta a los vivos, injustos con el dolor de los muertos, que buscan descansar la conciencia a cualquier precio.
La sombra del estigma
La angustia, el infierno de los otros se convierte en el de sus protagonistas cuando intentan hablar con el resto. Enriquez da testimonio de una sociedad polarizada, en la que la solidaridad brinda ayudas a cambio del fanatismo. Sus personajes se alienan o intentan pedir ayuda antes de sentir el “espesor de la violencia por nada, por una chispa”.
Pero tambien sobre las marcas del estigma, aquellas capaces de separar a su gente sombria del resto del mundo. La pintora argentina Mildred Burton toma vida a traves de la mirada de su hermana en Los pajaros de la noche, otra de las historias. Asistimos a años cruciales para la artista. Los yaguaretes, enormes felinos que se pasean por habitaciones en sus pinturas, nos recuerdan a su portada del chileno Guillermo Lorca. Su hermana, marcada por la enfermedad se descompone al tiempo que lo hace la casa familiar, oscura y opresiva, surcada por los aires de la violencia y la muerte, un denominador comun entre sus personajes.
Enriquez da testimonio de una sociedad polarizada, en la que la solidaridad brinda ayudas a cambio del fanatismo
El estigma se convierte en el macguffin con el que la argentina nos distrae, atrayendonos hacia lugares insospechados. La marca de la violacion de la matriarca familiar provoca años mas tarde en su hija una metamorfosis extraña en su rostro, privandolo de facciones. La mascara de piel es un reflejo de la del agresor de su madre, incapaz de recordar sus rasgos, solo un borron que un dia sentencio su vida y la de todas las mujeres de la familia.
A veces, son sus personajes quienes modifican su cuerpo y anhelan apendices inservibles. En Metamorfosis, su protagonista conserva los tumores benignos que le extraen de su utero. Como un homunculo acostado sobre el hielo al que observa con el cariño y la curiosidad de un bebe imposible, extirpado de su vientre infertil que decide insertar en su propia espalda. De reojo en el espejo observa su columna de animal, con la satisfaccion de quien observa las cosas por primera vez en su lugar: “Como si siempre hubiese estado ahi […] Con mi cuerpo entero y donde debe estar: bajo la piel”.
El terror en los otros
Mariana Enriquez se ha convertido en una de la figuras de la literatura latinoamericana mas relevantes de las ultimas decadas. Si Nuestra parte de noche puso en boga una mezcla de realismo y terror sobrenatural, estos doce nuevos cuentos sirven para seguir afirmando una voz literaria unica. Hace dos años, El otro lado (tambien publicado por Anagrama) dio a conocer en nuestro pais la obra periodistica su autora, permitiendo a sus lectores ahondar entre las obsesiones personales y fetiches de la escritora.
Desde el exito extraño de su primera novela, Bajar es lo peor, publicada cuando tenia apenas 21 años y que se convirtio en un fenomeno entre la literatura underground, su autora se lamentaba de la exposicion tan temprana y su relacion con el exito. En aquel momento, su editorial hizo proliferar el eslogan “la autora mas joven de Argentina”, empujandola a entrevistas donde recibia los envites de una critica machista y trasnochada.
Convertida en autora de exito dentro y fuera de su pais, Enriquez da buena muestra de la inmejorable salud de la literatura latinoamericana
Hoy, convertida en autora de exito dentro y fuera de su pais, Mariana Enriquez da buena muestra de la inmejorable salud de una literatura latinoamericana hacia la que seguimos mirando con anhelo. Con Un lugar soleado para gente sombria se reafirma aun mas en la capacidad que sus historias tienen para tomar el pulso de una realidad cruda, que se cruza continuamente con lo sobrenatural.
Cada uno de sus relatos nos empuja a querer imbuirnos de ese mundo extraño que su autora nos propone, donde la violencia y la maldad sin justificacion se encuentran con la sensibilidad extraordinaria de sus personajes.

