Detenciones masivas en Turquia en visperas de las elecciones, con Erdogan en la cuerda floja : Internacional de
Desde el 25 de abril, solo dos dias antes de comenzar la campaña electoral, se vienen realizando por toda Turquia redadas especialmente dirigidas contra los sectores que apoyan al Partido Verde de Izquierda, marca elegida por el movimiento kurdo, los partidos que le apoyan y que puede ser trascendental en las elecciones generales (presidenciales y legislativas) del proximo domingo 14 de mayo. Ese dia el presidente Recep Tayyip Erdogan se juega el proyecto politico autoritario que ha edificado a lo largo de las dos ultimas decadas.
Se calcula que, desde ese 25 de abril, han sido detenidas mas de 300 personas, fundamentalmente cuadros de partidos, abogados, periodistas y artistas. Es decir, personas que pueden jugar un papel clave como compromisarios en los colegios electorales, que pueden presentar reclamaciones por irregularidades, que pueden informar de las mismas, asi como del desarrollo de la campaña o que, al ser pintores, cantantes o actores, pueden dar prestigio a las candidaturas.
El partido pro-kurdo, el HDP (Partido Democratico de los Pueblos), asi como la media docena de grupos de izquierda que lo respaldan, han elegido esta marca “verde” al estar el HDP en proceso de ilegalizacion y solo presentan listas al Parlamento (Asamblea Nacional), con una destacada presencia de mujeres en sus listas. Para la presidencia, recomiendan votar a Kemal Kiliçdaroglu, lider del socialdemocrata Partido Republicano del Pueblo (CHP), para unir toda la oposicion al existir una posibilidad real de acabar con 20 años de autoritarismo.
Kiliçdaroglu preside una coalicion, Alianza Nacional, con partidos de centroizquierda e islamistas moderados contrarios al radicalismo de Erdogan. Promete retornar a Turquia por la senda del parlamentarismo, acabando asi con el sistema presidencialista que Erdogan consiguio introducir en la Constitucion turca, aunque con una victoria minima en el referendum del año 2017.
Dos años despues, este mismo apoyo de la importante minoria kurda ya hizo posible que, en las elecciones municipales, el partido del Gobierno, el islamista AKP (Partido de la Justicia y el Desarrollo), perdiera las principales ciudades del pais, comenzando por la capital politica, Ankara, y la cultural y economica, Estambul.

Frente a Kiliçdaroglu, Erdogan lidera la Alianza del Pueblo, con el apoyo de la extrema derecha (el Movimiento Nacionalista), otros partidos nacionalistas turcos y el Huda Par (Partido de Dios), organizacion terrorista que en los años 90 del siglo pasado cometio decenas de asesinatos entre sectores progresistas, sindicales y kurdos. Algunos restos de esta organizacion(cuando, a comienzos del actual siglo, la Policia se animo a desarticular sus comandos) huyeron a Irak, donde se integraron en Al Qaeda.
La importancia de una victoria de Kiliçdaroglu estriba no solo en recuperar ciertos valores democraticos, sino que la politica exterior puede dar un giro de 180 grados. Especialmente acabando con la ambigüedad de Erdogan frente a Putin en la guerra de Ucrania, debilitando el peligroso eje Moscu-Ankara-Teheran y, sobre todo, retirando el apoyo a los grupos islamistas que campan a sus anchas, al amparo del Ejercito turco, por el norte de Siria. Este apoyo turco a los grupos islamistas sirios es uno de los obstaculos mas serios para encontrar una salida al conflicto.
Aun hay otro factor que podria inclinar la balanza hacia el bloque opositor. El devastador terremoto de febrero afecto de lleno a las poblaciones kurda y alevi, una comunidad musulmana heterodoxa que suele votar a la izquierda. Entre las dos suponen practicamente un tercio de la poblacion total. La tardanza y mala gestion de la ayuda y labores de rescate en los cruciales primeros dias ha podido dejar huella incluso entre quienes todavia confiaban en el actual Gobierno.
Hasta ahora, la decena de encuestas que se han publicado dan ventaja a Kiliçdaroglu: 47% o 48% frente al 44% o 45% de Erdogan. De cumplirse estas previsiones, se iria a una segunda vuelta al no alcanzar ninguno la mayoria absoluta. En esa segunda vuelta serian claves los votos de los otros dos candidatos que participan, sin la menor posibilidad, en la carrera a la presidencia: Muharrem Ince, escindido del partido de Kaliçdaroglu, al que los sondeos atribuyen un 4%; y el derechista Sinan Ogan, expulsado del Movimiento Nacionalista, que podria alcanzar el 3%.
Por eso, la mayor incognita de estas elecciones esta en lo que decidan los cinco millones de nuevos votantes. Un sondeo, tambien difundido recientemente, indica un fuerte desasosiego de la juventud por el clima irrespirable que se vive con Erdogan en el poder. Un 43% de los encuestados no se sienten contentos en su pais y desearian abandonarlo.

De todo ello, se deduce que la sucesion de redadas en ambientes y partidos proximos a los kurdos en una treintena de provincias, los ataques a caravanas y oficinas electorales, incluso con armas de fuego, tendrian como objetivo amedrentar tanto a los voluntarios de la campaña electoral como al propio votante “verde” para reducir al maximo su presencia en la Asamblea Nacional. Ya que, aunque perdiera la presidencia, aun podria conservar el control del Parlamento, algo que no ocurriria si “los verdes” (los kurdos) consiguen, como algunos sondeos señalan, sobrepasar el 13% de los votos.
Los actos de violencia no han hecho mas que aumentar a medida que se acerca el dia de la votacion. Un seguidor de las candidaturas kurdas ha sido asesinado a tiros en Sirnak; se ha declarado el toque de queda en varios distritos rurales de Nusaibin, tambien en el Kurdistan turco; y desde el Gobierno se justifica que el alcalde de Ankara -del opositor CHP- haya sido apedreado en un feudo del AKP por “haber ido a provocarles”.
Y tambien por eso, Erdogan en los ultimos actos electorales no deja de acusar a Kiliçdaroglu de contar con el apoyo “de los terroristas”, del PKK (Partido de los Trabajadores del Kurdistan), grupo armado y verdadera “bestia negra” para buena parte de la poblacion turca. “Mi nacion -ha dicho Erdogan- no rendira su pais a quien quiere ser presidente con el apoyo de Qandil”, refiriendose asi a las montañas donde tienen sus principales bases las guerrillas del PKK.
Aun mas nerviosismo ha mostrado su ministro del Interior, Suleyman Solyu, al decir que Occidente esta intentando en estos comicios dar un golpe (de Estado) politico. Incluso se empieza a comentar que, como con Donald Trump en EEUU, los fieles seguidores de Erdogan podrian, en caso de perder, no aceptar los resultados de las trascendentales elecciones que este domingo se celebran en Turquia.
