En el agro, buscar mas rentabilidad puede reducir la salud del ambiente – este medio : Entretenimiento de Argentina
Asi lo señalo un estudio de la FAUBA y el CONICET en producciones extensivas de la localidad bonaerense de Pergamino, que evaluo el desempeño de millones de decisiones de manejo agronomico. El trabajo se baso en modelos computacionales y exploro tres decadas hacia el futuro.
A la hora de producir se toman numerosas decisiones. Entre otras, hay que elegir cultivos, fechas de siembra y manejo de plagas. ¿Existe la mejor combinacion? En este marco, a traves de modelos de simulacion de cultivos y algoritmos, un estudio de la Facultad de Agronomia de la UBA (FAUBA) y el CONICET busco entre mas de un billon de combinaciones y viajo 30 años al futuro para encontrar la respuesta. Entre los resultados, señalo que hay una tension fuerte entre el mejor desempeño economico y el ambiental: las decisiones que año a año priorizan generar mas dinero, degradan el ambiente.
La agricultura se realiza de forma extensiva en gran parte del mundo, y en la Argentina representa el 75% del area implantada. Por eso, es fundamental evaluar como funcionan los sistemas de cultivos extensivos. “En mi trabajo quise encontrar como impactan en su desempeño economico y ambiental las distintas decisiones que puede tomar un agricultor”, conto Felipe Ghersa, docente de Cerealicultura en la FAUBA y becario del CONICET en el instituto IFEVA (UBA-CONICET).
“Use modelos computacionales para simular tres decadas de agricultura y explorar el tipo de cultivo que el productor elige, las rotaciones, el nivel de insumos y cuando y a que densidad siembra, entre otros manejos. Por un lado, me base en modelos de simulacion para estimar los rindes en funcion del clima, del suelo y de ciertas caracteristicas fisiologicas de las plantas. Por otro lado, aplique algoritmos de optimizacion para analizar las millones de combinaciones y ordenarlas segun sus desempeños. Lo que a campo tardamos un año, lo podemos hacer ahora en un par de segundos con gran efectividad”, explico Ghersa, quien realizo el trabajo con informacion de Pergamino, provincia de Buenos Aires.
Entre los resultados, el docente destaco que encontro compromisos entre el desempeño ambiental y el economico. “Los sistemas que tuvieron el mejor desempeño economico, no fueron los de mejor desempeño ambiental. Cuando buscamos maximizar el beneficio economico a traves de la agricultura, hay mayores impactos ambientales”.
“Sobre todo, lo vemos al aumentar el uso de insumos; por ejemplo, de fitosanitarios. Entonces, aparece una primera eleccion, si ir hacia sistemas con mayor desempeño economico y perder desempeño ambiental, o viceversa”, agrego Ghersa, quien es dirigido por Diego Ferraro, docente de Cerealicultura en la FAUBA e investigador del CONICET.
“Los puntos intermedios requieren consensos de la sociedad ya que en el medio perdemos un poco de desempeño de economico y ambiental. La pregunta es cuanto estamos dispuestos a perder de cada uno y que los sistemas se mantengan como una actividad rentable, pero no degraden al ambiente a un punto que no se pueda producir mas”.
Bases para el futuro
Felipe indico que el desempeño economico es sencillo de incorporar en sus modelos computacionales, pero que el ambiental es mas complejo. “Para abordarlo, lo redujimos a un conjunto de variables representativas del funcionamiento minimo que necesitaria un sistema de produccion de alimentos, fibras o commodities. Miramos la dependencia del uso de energia no renovable, la biodiversidad y la salud del suelo”.
Asimismo, hallo una tension muy marcada entre el desempeño economico y los aportes de carbono al suelo, “por ejemplo, cuando comparamos elegir una monocultura de soja o una de maiz. El cereal hace grandes aportes de carbono al suelo, pero la oleaginosa es mas rendidora en terminos economicos. Entonces, si se prioriza el dinero, la soja va a ocupar gran porcentaje de las rotaciones, a costa de una posible erosion del suelo”.
En este sentido, Felipe añadio que es clave conocer cuanta materia organica pueden perder los suelos hasta que los rindes del sistema bajen de forma drastica. Tambien aclaro que determinar esos valores ‘umbrales’ es muy complejo. “En los sistemas extensivos con alta proporcion de soja, se reduce la materia organica del suelo. En Pergamino es un hecho”.
Incorporar los cambios
A futuro, Ghersa y Ferraro quieren replicar el estudio en otras regiones para conocer si se mantienen los compromisos que observaron en Pergamino o si es posible aumentar el desempeño economico y el ambiental al mismo tiempo. Ademas, van a evaluar que pasa cuando modifican los ‘forzantes del sistema’, como el clima o los precios.
“En nuestro estudio asumimos que el clima se mantiene igual que en los ultimos cincuenta años, pero el cambio climatico afecta el patron de las lluvias y las temperaturas. Tambien queremos ver que pasa cuando cambian los precios. Aunque la soja es el cultivo estrella de las ultimas tres decadas, el maiz empezo a ganar en precio y en impuestos”, finalizo Ghersa.
POR: SEBASTIÁN TAMASHIRO (SLT-FAUBA)