Aldeas como Tagadirt siguen en la cima del olvido tras el terremoto de Marruecos : Internacional de
“Solo prensa extranjera, ¡ningun medio de Marruecos ha venido por aqui!”, dice otro de los chavales que nos recibe. Un grupo de amigos de entre 20 y 25 años se apresura a mostrarnos su pueblo con un extraño orgullo. Nada queda en pie. Segun las mediciones en el terreno, la aldea esta a seis kilometros del epicentro.
Solo el minarete es visible en el amasijo de muros de adobe, plasticos azules, mantas y alfombras reliadas con vigas de madera. El hedor se extiende por todo el monte, “estamos encima de un burro” que estaba en la cuadra cuando el sismo lo aplasto, los chavales imitan el rebuzno del burro en descomposicion y se rien. Contra todo pronostico, estan euforicos.
El olor es comun en todas las montañas de escombros en las que ya quedan pocos cadaveres que extraer, pero en las que aun quedan muchos animales. Muchas de las casas de adobe tenian un patio con gallinas y un pequeño habitaculo con paja en el que pasan la noche las vacas o burros de cada familia.
Los animales en descomposicion son otro de los peligros que acechan a los supervivientes. Los equipos de la ONG Bomberos Unidos sin Fronteras (BUSF) desplegados en la zona alertan de que, a partir de ahora, comienza la fase de epidemias por la descomposicion de restos organicos.
Tagadirt
Zona cero del #TerremotoMarruecos
No queda nada en pie
Sin electricidad para llamar al rezo, vuelven al pasado. pic.twitter.com/p4lKWLNt8z— gonzalo wancha (@GonzaloWancha) September 14, 2023
La hora del rezo llega y el iman de Tagadirt se sube a los puntos mas altos de lo que queda de pueblo. Su voz acalla el bullicio de los jovenes, energicos ante la visita de la prensa extranjera. El minarete y los altavoces ya no funcionan. Toca volver a un pasado remoto. En cuento acaba la llamada a orar, los chavales nos piden una foto de grupo. La juventud de la aldea se va añadiendo a un retrato de familia. De fondo, no hay nada mas que deserticas laderas o haimas. Le preguntamos a Abde si tienen electricidad para cargar los telefonos, le cambia el gesto y dice: “¿quieres hablar de los problemas o me enseñas la foto?” Esta claro, estan cansados de lamento y tragedia. Le envio la imagen y bromean, van a abrir una cuenta en Instagram o en Tinder para Tagadirte.
Menos evasivo se muestra Omar Olmahtar. Se empeña en enseñarnos su casa derruida. En ella ha perdido a toda su familia, a su mujer, un hijo y dos hijas. Los chavales le rodean, le dan abrazos y animos. Les hacemos la pregunta que ronda toda la region y que nadie sabe responder: ¿que piensan hacer, como van a vivir? La respuesta, la misma obtenida en varias aldeas: se encogen de hombros y señalan al cielo.
Tagadirt esta a 2.136 metros de altitud. Abde nos enseña fotos suyas en la puerta de su casa del ultimo mes de diciembre. La imagen le muestra encogido de frio, todo esta inundado de nieve. Hoy, una ligera lluvia podria ser mortal y la prevision del tiempo revela que llovera en los proximos dias. Pero no hay un solo techo firme en el que los cientos de vecinos puedan resguardarse.
La zona de Imzilene integra a varios duares –aldeas que no superan por lo general los 500 vecinos– como Tagadirte, Irsane o Imi N´Tlit. En total, hay 7.500 habitantes en esta area. Segun las imagenes satelitales de Copernicus, el antes y el despues del terremoto revela que hay 130 hogares derruidos. Pero la realidad es que, lo que ha quedado en pie, es inhabitable.
Analisis preliminares sobre la valoracion de daños de la ECIS (estudio de construccion internacional) de Casablanca que monitorea las edificaciones que quedan en pie, la rehabilitacion de las viviendas seria mas costosa que el derribo total de las aldeas. Desde Cruz Roja Internacional cifran en 105 millones de euros la cantidad necesaria para ”para poder responder a las necesidades mas urgentes”, como agua, saneamiento, higiene y asistencia sanitaria, dijo desde Suiza directora de operaciones del FICR, Caroline Holt.
El ministerio de Interior de Marruecos continua dando una respuesta lenta y caotica, segun lo vivido en Tagadirte, pero las tiendas azules y amarillas van complementando el nuevo paisaje que ha dejado el sismo en el Alto Atlas. El ejercito erige en Asni, dos horas al sur de Marrakech, un campamento con 250 tiendas de campaña. Las ultimas cifras oficiales estiman que el terremoto de Al–Haouz, una denominacion mas certera que la de #TerremotoMarrakech, deja ya 5.674 heridos y 2.946 muertos. Para las decenas de miles que han quedado sin hogar, las tiendas de campaña no seran suficientes.