Hinchas del Tolima protagonizaron conmovedor adios a Gabriel Camargo : Deportes de Colombia
El hombre que marco un antes y un despues en la historia del Deportes Tolima, recibio en la que fue su morada el mas sentido de los homenajes, quiza nunca antes brindado a alguien que estuviera vinculado de forma tan estrecha a la institucion. La memoria de Gabriel Camargo Salamanca, quien antes de partir dejo cinco titulos en el FPC y el regreso a Primera, tuvo su ultimo y desgarrador adios.
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Ante unos 3.000 espectadores en las tribunas del Manuel Murillo Toro de Ibague, la familia del ‘Vinotinto y Oro’ encontro consuelo en el apoyo fiel de todos quienes han gozado de los triunfos del equipo. Esos que sin importar la posicion en tabla sintieron una profunda deuda de honor con su mecenas y acudieron a las graderias en busqueda de esperanza con miras al desafiante futuro.
Desde tempranas horas, las tribunas occidental, oriental y sur del escenario deportivo empezaron a albergar a los fanaticos de la ‘tribu’, que con banderas, camisetas y estandartes de todo tipo correspondieron a esta cita. Con el sentimiento a flor de piel, fue normal ver como las lagrimas rodaron por los pomulos de un buen numero de ellos, conmovidos por la ausencia del llamado ‘gran jefe’.
Propios y visitantes, que nunca dejaron de querer a esta tierra, vivieron un acto conmovedor. Que inicio con la presencia del plantel en el terreno de juego, poniendose el uniforme y honrando el respaldo dado por el exsenador. Y continuo con una misa solemne, en la que quedo explicita la comunion entre el esfuerzo y la fe. Esa que fue capaz de mover montañas e hizo posible lo imposible.
Los tesoros de todo un pueblo fueron traidos como la gran ofrenda al alma del ‘Cacique’, que lucho con sus virtudes y temores para bañar de gloria a toda su estirpe, sin descansar hasta lograrlo. El desfile que empezo con la copa del ascenso y culmino con la Superliga, su ultima celebracion, tambien trajo consigo junto a dos de sus mas nobles guerreros: el tecnico Hernan Torres y el capitan Julian Quiñones.
Seis trofeos, uno tras otro, en el medio del verde campo, como simbolo preciado del club que estuvo en los circulos del infierno, pero encontro su salvador, brillaron a la distancia. Su gran protector, el que se encargo de arrebatarlos de plazas ajenas y llevarlos bajo su brazo en tantas ocasiones, esta vez no pudo disfrutar de sus botines. Los mismos que trajo de ciudades como Bogota, Cali y Medellin, en hazaña de dimensiones incalculables.
Luego, la noche se volvio noche y solo brillo el camino hacia el infinito descanso de Camargo Salamanca. Sus cenizas, representadas en las de un Ocobo, como crecen por toda la ‘Tierra Firme’, fueron instaladas justo al lado del busto que durante casi 30 años estuvo en el ostracismo. Pero que encontro un nuevo ‘hogar’, para recordarle a los niños y jovenes del mañana un legado eterno.
Foto: Club Deportes Tolima
En un Ocobo que, como dice la cancion, crece de todos los colores, en tierra de bundes y cantores. Y en alegoria de un orgullo que corre por las venas de miles de tolimenses, quienes de seguro -como el veterano dirigente- hicieron su promesa de alentar hasta el dia en que sus cuerpos digan basta. Porque cono bien profesan: un amor como el que se le entrega a un onceno es el mas puro que puede haber.
Y desde la popular ‘rugio’ el grito de los que estuvieron cuando nadie mas lo hizo y revalidaron sus votos. Se erigio, otra vez, la figura de su fiel estampa, la que lo conmovio hasta llevarlo al llanto y lo motivo a dejar sus ultimas fuerzas para hacer de su proyecto deportivo aun mas ambicioso de lo que ya era. Camargo Salamanca, con sus bemoles, se encargo de hacer del Tolima un elenco poderoso.
“La pasion por el Deportes Tolima es lo que me mueve a mi. Nada distinto, no es el dinero. Yo quiero lo mejor, y para eso tengo que tener lo mejor y rodearme de los mejores, y me siento muy satisfecho del equipo que hemos conformado (…) Eso es lo que quiero y lo luchare hasta el dia de mi muerte. Con la bandera en alto”, dijo en una de sus ultimas apariciones, con su habitual tono.
Don Gabriel ya preside la mesa de aquellos forjadores de ilusiones como Manuel Rubio Chavez, Jorge Guzman Molina, Humberto y Lisandro Gonzalez, Luis Guarnizo y Hector Rivera: si, el mismo del famoso ungüento medicinal; solo por nombrar a los dirigentes mas destacados. Y de leyendas como German Castellanos, Elson Becerra, Marcos Coll, Enrique Ferrari y el querido Ricardo Ciciliano.