Camaron de la Isla sigue vivo: un viaje a su San Fernando natal en el 30 aniversario de su muerte : Entretenimiento de España
Entre la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, San Fernando (Cadiz), hasta las marismas y las salinas del caño de Sancti Petri, se encuentra el humilde barrio de Las Callejuelas, el entorno en el que se crio Jose Monje Cruz, Camaron de la Isla. Decia que la gente no entendia su manera de sentir pero no seria porque no lo cantara…
En los veranos de su infancia, cuando salia de la fragua en la que trabajaba su padre, se paraba a darse un baño en el puente Zuazo (San Fernando) y terminaba los dias en la Venta de Vargas para ver a los artistas que cantaban.
Quiso ser torero, pero no se le daba bien. En realidad la vida le tenia preparado algo mejor, contar por alegrias, tangos, bulerias y sevillanas lo que sentia. Y asi, desde los patios de las Callejuelas y las ventas de San Fernando, su arte cruzo el oceano que le vio crecer.
Su disco mas polemico, ‘La Leyenda del Tiempo’, fue el album con el que revoluciono el flamenco. Incorporando en sus canciones el bajo electrico, muchos amantes del flamenco no entendieron su musica. “Ya gustara“, decia, como si supiese que aquel desastre en ventas seria mas tarde una anecdota que recordar en su exito internacional.
Camaron de la Isla era un adelantado a su tiempo cuya unica preparacion a la hora de subirse a un escenario, para calentar la voz, era su Winston.
El 2 de julio de 1992, Jose Monje Cruz fallece a las 7 de la mañana a causa de su cancer de pulmon en el Hospital Germans Trias i Pujol, en Badalona.
Sus origenes
30 años despues de su muerte, su nombre sigue en las palabras de la gente, sus canciones siguen sonando y muchos ‘camaroneros’ de todas las edades siguen paseando por los lugares donde crecio el artista para llenarse de su embrujo.
Sigue habiendo curiosidad por sus raices. Tanto es asi que a principios de este año se publico su biografia en modo de novela grafica: ‘Camaron, dicen de mi‘, de Carlos Reyman (texto) y Raulowsky (ilustraciones). “El flamenco en mi tierra es un elemento de identidad. En un trabajo sobre el flamenco, obviamente Camaron era el mas adecuado para abrir ese homenaje“, cuenta Raulowsky a laSexta.com. El ilustrador asegura que este proyecto, ademas, fue muy personal ya que su compañero Carlos Reyman, guionista tambien de la novela, fallecio justo cuando se publico: “Todas esas consecuencias tambien estan en la obra. Cuando a Carlos le diagnostican el tumor, me encuentro dibujando a Camaron en ese estado. Y cuando acabo mis dibujos, mi amigo se estaba muriendo. El comic te lleva de la mano a la muerte de Camaron de la Isla, a su leyenda. Ha sido un trabajo muy bonito y doloroso“.
En esta obra, Raulowsky dibuja el nombre de cada capitulo con los miticos azulejos que llevan las calles del centro de San Fernando: “Estos azulejos son la representacion del flamenco, de como se va mestizando. Al estar pegados en la pared, cuando se caia antiguamente una letra, habia que poner otra, y la tipografia nunca era la misma, era mas limpia y nueva, pero la pureza y el mestizaje sigue estando ahi“. Lo mismo pasaba con el flamenco de Camaron. “Cantaba lo que vivia y como lo hacia. Era sincero, autentico y humilde, por eso le ha seguido mucha gente”, añade el autor.
La forma de ser de Camaron, su pureza y humildad, llamaba mucho la atencion del publico porque se sentian identificados con el y le admiraban por llevar su arte con total naturalidad. En esto mismo insiste Lolo Picardo, portavoz de la familia de la Venta de Vargas: “Hasta en eso fue revolucionario. Camaron era muy buena gente, no hablaba mal de nadie. Los gitanos venian con sus hijos enfermos para que Camaron les tocara y se curasen. Él se ponia ‘colorao’, decia que el cantaba pero que no sabia curar. Era muy humilde”.
El San Fernando de Camaron
Este 2 de julio, como en cada aniversario de su muerte, el mausoleo se viste con flores de colores que le llevan su familia y seguidores, aunque Nuria Lopez, responsable tecnico de la Oficina de Turismo de San Fernando, asegura que no pasa un dia sin que alguien llegue a reponerlas: “Es un lugar muy autentico. Siempre tiene flores su tumba“.
Lopez explica a laSexta.com que para San Fernando, Camaron siempre es un reclamo. Asi, cuenta que hace un año se inauguro al lado de la Venta de Vargas su centro de interpretacion, un museo con todo tipo de articulos personales de Camaron que su propia familia ha cedido para que todo el que quiera pueda visitarlo: “Esta abierto todos los dias menos los lunes y es gratuito”. “Estan sus camisas, sus discos, sus piezas musicales… Hay libretas con comentarios super curiosos de su puño y letra, una gran cantidad de instrumentos extraños que coleccionaba… Era innovador, rompedor… Un genio”, explica.
La casa donde vivia Camaron con sus padres tambien esta abierta al publico. “Hay dos personas que se encargan de hacer la visita porque no es lo mismo verlo a que te lo cuenten”. Nuria Lopez asegura que es imprescindible escuchar la historia de su infancia cuando llegas a su casa natal ya que ahora, al haber pasado tantos años, esta reformada y requiere la explicacion para poder imaginar como vivian: “Son patios de vecinos donde se compartia la cocina, los baños… Y dentro tenia dos habitaciones muy pequeñas”. Para no hacer spoiler, no cuento lo que Lopez me desvelo que dejan para la parte final: “Algunas lagrimas se caen al llegar alli“.
Otro de los sitios imprescindibles a visitar en esta ‘ruta’ de lugares emblematicos de Camaron es la Venta de Vargas: “Camaron era como mi tio. La venta le dio su sitio para darse a conocer y el a nosotros nos dio todo, entre otras, ser el mejor lugar flamenco de la historia en España”, cuenta tambien Lolo Picardo, quien asegura que, al año, reciben a unas 20.000 personas de todas las nacionalidades “expresamente por Camaron”. “Camaron venia a cantar aqui, era su casa, se conocia la venta mejor que nadie. Cantaba lo que le salia. Con 17 años saco un disco que grabo aqui, con una grabadora en la puerta. Aqui le hizo Alberto Garcia Alix sus fotos mas famosas, e incluso fue este el sitio donde celebro el bautizo de su hijo menor. Duro tres dias, fue un escandalo”, confiesa Picardo.
Camaron deslizaba hacia abajo los dedos corazon de ambas manos para tocar las palmas. A pesar de todos los instrumentos que fue conociendo a lo largo de su vida, solo eso le bastaba para acompañar a su voz rasgada y dejar a todos sin aliento al escucharle. “Despues de 30 años la gente sigue nombrandole y acordandose de el. Nosotros decimos que es la razon por la que Camaron sigue viviendo todavia“.